Dos interrogantes en simbolización de la toma de decisiones

La toma de decisiones es una actividad compleja que forma parte de las funciones ejecutivas, estas son las capacidades cognitivas complejas, necesarias para planificarse, organizarse, revisar y regular el comportamiento humano, para adaptarse al entorno y poder alcanzar objetivos y metas. Dentro de las funciones ejecutivas se encuentra la toma de decisiones, pero también encontramos la memoria de trabajo, la planificación, el razonamiento, la flexibilidad cognitiva y la inhibición.

¿Qué es la toma de decisiones y qué mecanismos están implicados?

La toma de decisiones es el proceso de realizar una elección entre varias variables y alternativas en función de nuestras necesidades, teniendo la capacidad de comprobar todas las consecuencias y resultados que tendrán las diferentes elecciones.

Las áreas cerebrales que están implicadas en la toma de decisiones son la corteza prefrontal ventromedial, que integra la información sensorial y empírica para tomar decisiones. 

La corteza prefrontal dorsolateral está implicada en las diferentes funciones ejecutivas como la planificación, memoria de trabajo, flexibilidad cognitiva y estrategias de trabajo.

La amígdala será la encargada de procesar la información sensorial con los estímulos que considere que afectarán negativamente al proceso de tomar una decisión, ya que si estas emociones negativas se asocian a experiencias previas, éstas influyen en la toma de decisiones.

La corteza cingulada anterior está relacionada con las consecuencias de la toma de decisiones que tienen cierto riesgo o incertidumbre.

Etapas que forman parte para la toma de decisiones

El primer paso es procesar los estímulos relevantes del entorno dotándolos de significado, categorizando y dándole un valor emocional, los estímulos podrán ser externos, como circunstancias vividas o internos como nuestras expectativas o cogniciones previas acerca de algo específico. 

Dentro del segundo paso se generan las posibles alternativas que elegir para un problema específico o situación, a medida que se generen alternativas y opciones, algunas se van descartando y surgen otras nuevas, ejercicio un papel importante la flexibilidad cognitiva. Una vez se tenga una decisión tomada se genera un plan para determinar las posibles consecuencias, calculando riesgos y beneficios.

En el último paso se comparan los resultados obtenidos con los que se esperaban, otorgándole un valor a esta experiencia, ya que éstos ayudarán para futuras tomas de decisiones.

Test torre de Londres para evaluar la toma de decisiones

¿Cómo se evalúa la toma de decisiones?

Para evaluar la toma de decisiones se realiza una evaluación neuropsicológica, donde aparte de evaluar esta función cognitiva, se evalúan todas las demás, como la memoria, memoria de trabajo, atención, lenguaje y las demás funciones ejecutivas. Las pruebas específicas que pueden utilizarse para evaluar la toma de decisiones son:

  • La torre de Londres (Shallice, 1982): Este test es utilizado para valorar la planificación e inhibición, también la velocidad de procesamiento y la toma de decisiones, si la persona es impulsiva decidiendo o no. Se le suministran al sujeto unas varillas con tres bolas de colores que se pueden ensamblar en dichas varillas, el paciente deberá reproducir el mismo diseño que tiene hecho el examinador, utilizando el menor número de movimientos posibles.
  • Serie de dígitos en orden inverso.
  • Wisconsin Card Sorting Test (Berg, 1948): Este test valorará la capacidad de la persona de tomar decisiones, en cuanto a la impulsividad que ejercerá para responder correctamente el test. Esta prueba contiene cuatro tarjetas estímulo y 128 tarjetas de respuesta, éstas varían de color, forma y número. La persona deberá colocar las tarjetas respuesta al lado de alguna de la tarjeta estímulo, se le irá indicando si es correcta o no, siendo el objetivo tener el mayor número de respuestas. El paciente irá obteniendo una categoría conceptual y el examinador puede ir modificándose cuando lo establezca.
  • Iowa Gambling Task (A. Damasio, 1994): es un test para valorar la capacidad de tomar decisiones en la vida real a partir de cuatro mazos de cartas, donde algunos generarán beneficios económicos y otros pérdidas.

Tratamiento de la toma de decisiones

La toma de decisiones puede verse afectada en diferentes trastornos, cómo pueden ser el Trastorno Obsesivo Compulsivo y el Trastorno del Espectro Autista por falta de rigidez cognitiva. Dentro de esta capacidad cognitiva influye la impulsividad y las personas impulsivas con trastornos de control de estímulos, como pueden ser el Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad.

El tratamiento para la toma de decisiones se encargará de ayudar a la persona a identificar el problema para elegir las alternativas posibles que existen, hablando de las posibles consecuencias que surgirán de cada alternativa y comprobando los resultados que generarán la alternativa elegida para aprender para una nueva situación.

En resumen, la toma de decisiones es un proceso cognitivo complejo, el cual hay que trabajar con un profesional si se denota algún déficit o problema para tomar decisiones de alguna situación o un problema en concreto, para ello habrá que evaluar dicha capacidad cognitiva con una evaluación neuropsicológica a partir de diferentes test como la Torre de Londres o la Iowa Gambling Task.